¿Qué es Swing Trading?

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¿Qué es Swing Trading?

Si estás interesado en el mundo de las criptomonedas, el swing trading es uno de los conceptos que debes conocer. Sobre todo si te interesa el mundo del trading y el mercado de criptomonedas. En este artículo te contaremos todo sobre qué es el Swing trading y cómo funciona.

El swing trading es, en pocas palabras, una estrategia comercial muy conocida y recomendada para aquellos traders novatos. Es una forma relativamente fácil de expresar una opinión sobre el mercado, gracias al tiempo que se puede gestionar. Los swing traders suelen encontrarse en la mayoría de los mercados financieros, como divisas, acciones y criptomonedas. Seguramente te estés preguntando si el swing trading es la estrategia ideal para ti y cómo funciona. En este artículo te contaremos todo de forma sencilla. 

¿En qué consiste el Swing trading?

El swing trading se trata de una estrategia comercial que consiste en tratar de capturar los movimientos de precios que tienen lugar en un período de tiempo corto o mediano. La idea detrás del swing trading es capturar lo que conocemos como “swings” del mercado que pueden durar unos días o semanas. 

Las estrategias de swing trading son más recomendables para los mercados en tendencia. Si hay una tendencia fuerte en un marco de tiempo más largo, las oportunidades de comercio de swing pueden ser abundantes y los swing traders pueden aprovechar los movimientos bruscos de precios. En contraste, el swing trading puede ser mucho más difícil en un mercado que se está consolidando. Después de todo, si el mercado se lateraliza, sería complicado captar grandes movimientos de precios.

Ganancias como swing trader

Como hemos mencionado anteriormente, el objetivo de los swing traders se basa en registrar los movimientos de precios que tienen lugar en el transcurso de unos pocos días o semanas. Como resultado, los swing traders mantienen sus posiciones durante más tiempo que los operadores diarios, pero menos que los inversores que compran y realizan lo que conocemos como “holding”. Los swing traders a menudo hacen uso del análisis técnico con el objetivo de obtener ideas sobre trades, pero no necesariamente en la misma medida que los day traders.

Teniendo en cuenta que los eventos de tipo fundamental pueden tener lugar durante semanas, los swing traders también pueden utilizar el análisis fundamental en sus planes de trading. Sin embargo, la acción del precio, los niveles de soporte y resistencia, los patrones de gráficos de velas japonesas y los indicadores técnicos se utilizan a menudo para determinar las configuraciones de trading. Entre los indicadores más populares empleados por los swing traders se encuentran las medias móviles, el Índice de Fuerza Relativa (RSI), las Bandas Bollinger y la herramienta de los retrocesos Fibonacci.

Los swing traders generalmente se centran en gráficos a mediano y largo plazo. Esto se debe a que una fuerte tendencia alcista o bajista necesita confirmación en un marco de tiempo prolongado. Sin embargo, también se puede establecer en un marco de tiempo de tipo intradía, como un gráfico de 1 hora, 4 horas o 12 horas para buscar puntos de entrada y salida específicos. Por ejemplo, el desencadenante podría ser una ruptura o un retroceso en un período de tiempo más corto.

Sin embargo, el gráfico intradía es probablemente el marco de tiempo más importante para el swing trading. Sin embargo, las estrategias de trading y de inversión pueden variar mucho entre los traders. Todo lo que hemos visto hasta este punto no describe reglas específicas, sino que se trata de algunos de los ejemplos más comunes.

Day trading vs. swing trading

Los day traders se caracterizan por buscar y aprovechar los movimientos de precios a corto plazo, mientras que los swing traders se caracterizan por buscar movimientos más grandes. Por lo tanto, el day trading se trata de una estrategia más activa. Esto se debe a que los traders deben monitorear el mercado de forma regular y no dejar posiciones abiertas por más de un día. 

En contraste, encontramos a los swing traders quienes pueden adoptar un enfoque más pasivo. Estos son capaces de controlar sus posiciones con más frecuencia debido a que buscan aprovechar los movimientos de precios más tardan más en desarrollarse. Teniendo en cuenta que estos movimientos tienden a ser más grandes, los swing traders pueden obtener grandes ganancias mayores, incluso con unas pocas operaciones ganadoras.

Los day traders se caracterizan por emplear el análisis técnico casi siempre y de forma exclusiva. Los swing traders a menudo emplean una combinación de análisis técnico y fundamental, mayormente concentrada en los aspectos más técnicos. En el otro extremo del espectro, los inversores pueden ignorar los factores técnicos y operar solo con los factores fundamentales. 

Si te estás preguntando cuál de los dos sería el mejor para ti, lo primero que debes preguntarte es en qué lado de este espectro te encuentras. Tienes que identificar, desde marcos de tiempo más cortos hasta más largos, las técnicas y los fundamentos que preferirías utilizar. Conocer las respuestas a estas preguntas será clave para identificar la estrategia comercial que más se adapta a nuestra personalidad, estilo comercial y objetivos de inversión.

Para ello podemos pensar cuáles serán nuestras fortalezas y cuál es el estilo de trading que mejor las amplifica. A algunos usuarios les llama más la atención entrar y salir de forma rápida de las situaciones y no tienen que preocuparse por las posiciones abiertas mientras duermen. Otros usuarios, por el contrario, toman mejores decisiones cuando disponen de más tiempo para considerar todos los resultados posibles y planificar sus negocios. 

Claramente, podemos ir cambiando entre diferentes estrategias para ver cuál produce los mejores resultados. También puede operar en papel. Esto significa realizar operaciones con dinero falso para no correr riesgos antes de implementar las estrategias en nuestro plan comercial real.
Si decides comenzar a realizar este tipo de trade, puedes acudir a un exchange de criptomonedas y poner a prueba tus conocimientos. Eso sí, siempre haciendo tu propia investigación previamente y estando seguro de los pasos que vayas a dar. Recuerda que esta práctica conlleva un gran riesgo de capital.