Todo lo que siempre hemos leído de las criptomonedas incluía la palabra “seguridad”. En teoría son uno de los sistemas monetarios más prometedores, sin intermediarios, privados… ¿Qué podría salir mal? ¿Te imaginas que alguien pudiera hackear todas las criptomonedas del mundo? Lo normal es que no, ya que es todo lo contrario a lo que siempre se ha creído, pero es posible. Esto se debe a la computación cuántica. Imagina una supercomputadora tan potente que puede resolver en minutos problemas que a los ordenadores actuales les llevaría miles de años. Parece casi imposible.

La computación cuántica, a grandes rasgos, es una forma revolucionaria de procesar información que utiliza las reglas del mundo cuántico. Como seguramente sepas, el mundo cuántico es un mundo microscópico donde las cosas pueden estar en varios lugares a la vez. Por otro lado, están las criptomonedas, que basan su seguridad en complejos problemas matemáticos que, hasta ahora, eran prácticamente imposibles de resolver.

La pregunta es, ¿hay relación entre ambos mundos? ¿Deberíamos preocuparnos? En este artículo veremos cómo afecta la computación cuántica a las criptomonedas y qué se está haciendo para impedirlo.

¿En qué consiste la computación cuántica?

La computación cuántica es un concepto muy complejo, pero intentaremos explicarlo de una forma más sencilla. Imagina que estamos buscando un libro en una enorme biblioteca. Claramente, tendríamos que ir uno a uno revisando todos los libros a ver si está el nuestro. Así funcionaría un ordenador tradicional. Sin embargo, un ordenador cuántico sería capaz de revisar todos los libros simultáneamente. A esto le llamamos informática cuántica.

La clave está en un término muy conocido llamado «qubits» o bits cuánticos. Estos qubits se diferencian de los bits normales. Los normales solo pueden ser 0 o 1, como un interruptor que está encendido o apagado. Sin embargo, los qubits pueden estar en ambos estados a la vez. Es como si pudieran estar encendidos y apagados al mismo tiempo, o como si nosotros pudiéramos estar aquí y allá a la vez. Algo físicamente imposible, pero es el día a día en la computación cuántica. 

Esta capacidad de procesar múltiples posibilidades al mismo tiempo es lo que hace que las computadoras cuánticas sean tan especiales. Tienen la capacidad de resolver ciertos problemas matemáticos a una velocidad impresionante. Tanto que dejan a años luz nuestros ordenadores más potentes. Esto es lo que da lugar a las más recientes preocupaciones en el mundo cripto. Muchos de esos «problemas matemáticos imposibles» que podrían resolver los ordenadores cuánticos, son en los que se basa la seguridad de las criptomonedas. Claramente, ya no parecen tan imposibles. 

¿Cómo funcionan las criptomonedas?

El funcionamiento de las criptomonedas es mucho más sencillo. Son sistemas seguros donde si quieres acceder deberás usar dos claves; una pública y una privada. La clave pública es como tu dirección que compartes para recibir fondos. Por otro lado, la clave privada es como la contraseña que usas para enviar dinero. Esta combinación de claves está protegida por lo que llamamos criptografía asimétrica. Básicamente, se trata de un sistema matemático complejo. Tanto que ni siquiera el ordenador más potente del mundo podría descifrarlo en un tiempo razonable.

Lo que aporta la seguridad a las criptomonedas es lo increíblemente difícil que es acceder sin la llave correcta al sistema. Es como si nos dieran un resultado numérico y nos dijeran que tenemos que averiguar qué números específicos se multiplicaron para obtenerlo. Las posibilidades son casi infinitas, pero solo una es la correcta y sin ella, no puedes acceder. Las criptomonedas usan problemas matemáticos similares pero muchísimo más complejos. Básicamente, tienes una puerta que es extremadamente fácil de cerrar pero prácticamente imposible de abrir sin la llave correcta.

¿Las computadoras cuánticas pueden romper esa seguridad?

Ahora sí llegamos al centro del problema. Esa puerta imposible de abrir de la que hablábamos tal vez pueda abrirse con una ganzúa universal. Esa ganzúa son los ordenadores cuánticos. Recuerda que tienen la capacidad de estar en varios lugares al mismo tiempo. También pueden probar múltiples combinaciones a la vez. Estos problemas que nos tomarían años resolver, podrían resolverlos en minutos. ¿Ahora entiendes la gravedad de la situación? 

Es como si de repente alguien diseñara una máquina que puede descifrar todas las contraseñas del mundo… en minutos. Las consecuencias serían devastadoras. Cualquiera  con acceso a una computadora cuántica suficientemente potente podría entrar en cualquier wallet. Pero no te alarmes, al menos no de momento. Ahora mismo, las computadoras cuánticas no son lo bastante avanzadas para hacer esto. Sin embargo, los expertos creen que a la velocidad con la que avanza el desarrollo, es solo cuestión de tiempo.

¿Se está trabajando en el problema? ¿Deberíamos preocuparnos?

A pesar de que los pronósticos no son del todo favorecedores, hay buenas noticias. La comunidad cripto ya está al tanto de este tema y cada día trabaja más en lo que llamamos “criptografía post-cuántica”. Básicamente, lo que buscan es desarrollar nuevos códigos que ni siquiera los ordenadores cuánticos sean capaces de descifrar. En otras palabras, estamos trabajando en adelantar a los ordenadores cuánticos. Dicho así parece imposible, pero es viable. 

Por esta razón se han creado proyectos pioneros como Quantum Resistant Ledger (QRL). Estos proyectos construyen sistemas específicamente diseñados para resistir ataques cuánticos. Por su parte, las grandes redes como Bitcoin no se quedan atrás. Sus desarrolladores están investigando cómo realizar actualizaciones que mantengan seguras las redes existentes.

Seguramente ahora lo que más te interese saber es cuándo debes empezar a preocuparte. Pues según los expertos, aún faltan varios años. Hablamos de por lo menos una década de margen para que los ordenadores cuánticos sean lo suficientemente potentes. Sabemos lo que viene, pero tenemos tiempo para prepararnos.

Conclusiones

Claramente, el futuro de las criptomonedas se verá afectado en la época cuántica. Por un lado, tenemos el desarrollo imparable de la computación cuántica y por otro, la evolución constante de la seguridad criptográfica. Es un juego que nos recuerda que en el mundo digital, todo se encuentra en constante cambio.

Por lo menos sabemos que la comunidad cripto no está esperando a que llegue la crisis para actuar. Cada día trabajan en el desarrollo de nuevas soluciones, y aún tenemos tiempo de implementarlas. Se podría decir que actualmente, la informática cuántica no es un problema real, pero lo será.

En fin, aunque la computación cuántica es un desafío significativo para las criptomonedas, no va a significar el fin de las mismas. De hecho, lo que hará será impulsar la siguiente generación de seguridad en blockchain.